Una pareja tenía dos niños pequeños, de 8 y 10 años de edad, quienes eran excesivamente traviesos.
Siempre estaban metiéndose en problemas y sus padres sabían que si alguna travesura ocurría en el pueblo, sus hijos seguramente estaban involucrados.
La Mama de los niños supo que el sacerdote del pueblo había tenido mucho éxito disciplinando niños, así que le pidió que hablara con sus hijos. El sacerdote aceptó pero pidió verlos de forma separada, así que le envió primero al niño más pequeño.
El sacerdote era un hombre enorme con una voz muy profunda, sentó al niño frente a él y le preguntó gravemente:
¿Donde está Dios?. El niño se quedo boquiabierto, pero no respondió, solo se quedó sentado con los ojos incrédulos y abiertos.
Así que el sacerdote repitió la pregunta en un tono todavía mas grave:
¿Dooónde está Dios!!!? De nuevo el niño no contestó; entonces el sacerdote subió de tono su voz aún más, agitó su dedo apuntando frente a la cara del niño y gritó: Te estoy preguntando que
¿¡¡¡DOOOONDE ESTÁAAAA DIOSSS!!!?
El niño salió gritando del cuarto, corrió hasta su casa y se escondió en el closet azotando la puerta.
Cuando su hermano lo encontró en el closet y le preguntó: '¿Que pasó?' El hermano pequeño sin aliento le contestó: Ahora sí que nos van a hacer recagar! , estamos en serios problemas......................¡¡¡DIOS SE PERDIÓ!!! Y el huevón del cura cree que lo tenemos nosotros....!!!!